Captura la naturaleza y la belleza con un estilo marcado, un tipo de retrato que se mueve entre lo misterioso y lo débil, lo tétrico y lo sensible ,entre el juego y la muerte, niñas que parecen estatuas, o vírgenes, salidas de una película de miedo, tristes. Tan frágiles que se rompen, o todo lo contrario, con tanta fuerza que te matan con la mirada. La repetición de un caleidoscopio, la bruma en un lago, la textura de un vestido, un rojo intenso...flores secas, tan victoriana.
Aëla, que nombre es ese? nunca lo había oído, pero me siento muy cerca de ti, de tu manera de mirar, pestañear, soñar o si lo quieres llamar: fotografiar.
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