12 meses esperándote...

...dejar atrás a ese 13 maldito, que empezó mal y acabó regular. Te llevaste tantas cosas, las más queridas e importantes, y te quedaste con parte de mi salud y mi dinero. Lleno de tantas malas energías. 13, este número que parece un señor con papada y barriga,  pesado y con colesterol, mala salud y fumador de puros, bigote franquista y con aliento a seco, o peor aún, a peladilla. Rancio, que saluda con un "arriba España". Vete ya, y deja paso a al estiloso y delgado 14, con aire de galán francés, narigudo y con sombrero. Que huele a sándalo y a tranquilidad.